martes, diciembre 15, 2009

Severidad, El Arte Del Corregirse


Me pregunto sobre la autocontención y el arte de corregirse. Sobre esa gente que uno es consciente de que no es lo que aparenta pero que, al mismo tiempo, disfruta con el papel que aparenta. La autocorrección está, a mis ojos, más ligada con la severidad y lo espartano que con el snobismo y el arribismo quizás, por ese matiz de control en vez de desfase o por esa sutil marginación de los excesos, de lo accesorio, de lo profuso y vano -aunque sea glorioso-.

Veo a damas femeninas que en el fondo -y no tan en el fondo- tienen algo de artificial, de conceptual, de personaje de tragedia griega. Tienen algo de Artemisa... algo masculino, algo lejano, algo distante. Desde luego, más emparentado con el varonil Apolo que con la alocada y volubre Afrodita.


Se respira en ellas esa vena de corrección, de ultracorrección que nace sin ser afectada y no acaba de morir. Tiene algo de melancólico señorito y al mismo tiempo algo de chulo de calle, algo profano y algo maldito. Tiene también algo de maniaca meticulosidad, de loco escrúpulo sin caer en el exhibicionismo extraño al estilo bohemio. Pero, al mismo tiempo, tiene algo de guarida y subterfugio... algo de reina y verdugo.


Inevitablemente me recuerda a la bíblica Tamar que se cubre el rostro -aka se hace pasar por prostituta- para "yacer" (¿yacer?) con su suegro y cuando queda encinta -¿?- es acusada de adulterio. Su suegro quiere apedrearla y, ella dignísima -a la vez que puta- saca el manto y el bastón del hombre con el que yació y, su suegro, avergonzado y al mismo tiempo maravillado, es consciente de que es ella la justa. La única persona justa...


Me recuerda a ella porque tiene ese halo de dignidad y al mismo tiempo de contracción que tiene quien hace algo porque debe hacerlo sin querer hacerlo y por lo que recibe alegría y sufrimiento a partes iguales...


Hablaría de una naturaleza dual, de un complejo más dramático que el de Victor Victoria y de algo más humano -mucho más humano- que la androgeneidad. Pero, no es exactamente la fusión de dos polos que se unen. Esto no es hielo que arde ni fuego que hiela. Tampoco es potencia ni naturaleza sino más bien un artefacto que tiene algo de humano y algo de máquina.


Tiene algo de corazón y algo de eléctrico... Algo de lejano, de inalcanzable y al mismo tiempo esa convicción de que puedes poseerlo como quien compra algo aunque no de forma total. Tiene algo de pervertido y algo de puro, de dignísimo, de exageradamente limpio. Tiene algo de maldito y algo de bendito. Algo de delito y algo de acto de buena fe...

Y se ve... no hay más que mirar a la naturaleza dividida y fascinada por sus impulsos... no hay más que mirar la dura, la cruel, la taimada realidad que unas veces arponea y otras deleita. No hay más que intuir lo que el ojo atisba y el alma sabe....


No hay más que decir...
Bueno, quizás eso de que nada te turbe y nada te espante.
Pero, en todo caso, es otra historia...

12 comentarios:

ellabella dijo...

me ha encantado el post de hoy, me ha gustado tanto que lo lei dos veces, para que no se me quedara ni una de las palabras por el camino

Holly Golightly dijo...

Ellabella. Gracias. Un beso

variopaint dijo...

No sé si la autocontención tiene algo que ver con el arte de corregirse, es decir, el de saber enmendar los errores propios por la aplicación de la experiencia. El saber contenerse frente a los excesos es algo propio de ascetas, o más bien de estoicos, algo que tiene que ver con la introspección que valora más la realidad interior que la apariencia de las cosas (o los placeres del mundo). La cuestión de corregirse viene más de una actitud militante, y al fin y al cabo de una imposición externa ajena quizá a esa experiencia y enseñanza propia del estoicismo. Esparta no fue un ejemplo, precisamente, y frente a lo que pudiera pensarse, al poner de manifiesto valores que se producían hacia lo externo, hacia la acción por su bondad en si misma, sin tiempo para la reflexión, que era cosa de filósofos y que Esparta despreciaba. Los espartanos solamente tenían líderes (reyes, más bien) y ancianos que vigilaban la eficacia del sistema desde la atalaya de la edad, aunque la edad no fuera garantía de nada, salvo de la permanencia. El esnob es otra figura y dudo que sea capaz de corregirse, pues un auténtico esnob (como lo era Byron) siempre tiene un fundamento autodidacta, y se mira en su propio espejo. El arribismo es otra cosa, más bien un quehacer, al modo de los alpinistas, de manera que se puede ser un arribista esnob o ser un arribista y punto. El arribista carece de escrúpulos y en consecuencia carece de estética propia, ya que eso sería un estorbo para llegar a la cumbre que anhela.

De todas esa clase de personajes quizá el más interesante sea precisamente el esnob, frente al espartano o al estoico, precisamente por su producción posiblemente estética: espartanos y estoicos produjeron más bien poco, cada cuales con sus guerras particulares. La autocorrección quizá sí, aunque impide la frescura natural de la creación, al modificarla sin que se haya producido. En algunos países como el nuestro, tenemos una tradición de siglos de autocorrección, aunque la mayor parte de las veces eso fuera el resultado de algo impuesto. Resulta curioso el fenómeno, ya que algunas situaciones de corrección forzosa como la época de la Ilustración europea produce cosas de más enjundia que posteriores productos que llevan el sello revolucionario, seguramente porque las revoluciones son bastante formales, al fin y al cabo.

Excelente post, Holly.

Claudiafan dijo...

Una Claudia ambigua para el deleite de nuestros ojos.
Un ángel caído del cielo en el que todo nace sin ser afectado.
Enhorabuena por este Post.
Saludos desde el Schifferblog;P

Pau(Rox) dijo...

Disculpa mi ausencia estos días, pero entre el trabajo, la Navidad y el sistema Word press, no tengo un seg libre.
XXX preciosa, estupenda reflexión as always

Hummingbird dijo...

leyendo también el comment de variopaint: me ha gustado la definición de esnob, ligado a la estética. los ascetas y los espartanos no llevan también una estética? no muy 'estética' pero sí en una forma que dice 'soy espartano' 'no dado a los excesos superfluos'; tal vez sea un concepto mío muy a 'pie de calle' y no al que os referís vosotros, pero... sí, no?... tiene algo el espartano en sí que espanta, aunq un espartano 'auténtico' lo hace inintencionadamente, supongo vaya. ese aura que emana, que hace sentir culpable incluso a las plantas!(yu-yu).

el esnob es más... 'claro'? se ve a la legua que es un snob, es lo que es. y ya está... más fácil.

autocorrección... eso también da para otra historia holly. mañana paso por casa de coco. te envío mail pronto -me falta una foto... y esa has de verla!, :)

un XX!

Laura Soler dijo...

tu escritura es absolutamente fantastica! Si hicieras un libro definitivamente lo compraria ;)

Kate_Sgulp! dijo...

Estoy de acuerdo con el comentario anterior. Un libro recopilatorio de tod el blog :)
Que hermosas fotos y lo que escribes!! Hace que luzcan más.

Besos.

Holly Golightly dijo...

Variopaint. Te debo cosas pero es que siempre voy mal de tiempo, debe ser eso de hacer más cosas de las que se puede. Esparta es un pueblo fascinante. Mmmm... una bonita historia la de los tiranicidas en los tiempos que corren.

En cuanto al autoespejo censor del snob es básicamente necesario. Un snob tiene una imagen mental que desea proyectar, no debe pues acudir a la realidad sino a su mirada que juzga a los demás como si fuera él. Es una condición si ne qua non del snobismo que, tiene mucho de autocorrección sino todo...

En cuanto al arribismo. El arribismo es esa cosa informe que es graciosa y triste al mismo tiempo y que si produce humor, destila ternura. Ay.. el alma humana. Un beso

Claudiafan. Hermosísima Claudia. un beso

Pau. Todos estamos mal de tiempo. No te preocupes. :) Un beso

Hummingbird. Mmmmm... supongo que todo tiene una estética. Personalmente no creo que tenga demasiado que ver con ella sino más bien con la actitud -cómo no-. Espartano es autocorregido en parte pero no porque carezca de excesos sino porque moderación y ---pius- y virtud son sus máximas. Guerra cuando se necesita y paz cuando se puede. Exceso cuando es posible y contención cuando se debe. Un beso

Forgetmenot. Muchas gracias

Kate Sgulp. Sería hermoso, supongo. Pero... no sé si viable. Un beso

variopaint dijo...

No te preocupes Holly...cuando tengamos más tiempo te prometo una apasionante polémica sobre los esnobs y su circunstancia.

Otro beso

Holly Golightly dijo...

Variopaint. Muchas gracias. Un beso

dîner spectacle chippendales dijo...

Très androgyne en effet mais la classe est là presque inévitable alors!!! très belles photos en plus.
Karine