sábado, marzo 01, 2008

La Joya De La Corona


Remontándonos a los decadentes años de la expansión imperialista, Inglaterra denominaba a la India como la Joya de la Corona, la máxima colonia, el gran orgullo. Han pasado muchos años, arrebatos comunistas, capitalistas, liberales y dictatoriales de por medio y, Gran Bretaña sigue teniendo ese encanto decadente, victoriano, regio, soberbio e imperialista. La joya de la Corona ahora es McQueen, un genio. El hombre que aúna pret a porter y costura, el hombre del delirio, del lirismo, onírico y mágico. Teatral, realista, británico y mundial. Genial. Una joya en París.


McQueen recrea un mundo oscuro, apagado, tortuoso donde lo doloroso del protocolo es plausible. El negro, sobrio y riguroso; la decadencia; lo inglés. Mujeres anacrónicas con aires de ruptura, princesas encerradas, el mundo de la burbuja de cristal toma dimensiones en la mente de McQueen.


Damas de la reforma, serias, severas, austeras y dedicadas al ostracismo con un punto huraño. Encajes melancólicos y exceso curado a base de necesidad pero esa mirada altiva propia de la corte.


Y también están ellas, damas del averno y la perdición. Demi mondaines, mujeres perdidas, damas sin reputación. La pesadilla y el sueño de McQueen que las trata como a diosas oscuras, damas de las tinieblas.


Son princesas jóvenes, meninas, niñas envueltas en el esplendor protocolario de la Corte, pequeñas damas, insufribles mujeres. Encajes, puntillas, volantes, guardainfantes y corsés pero severos y con un halo de indiferencia sublime.


La oscuridad y el frío vuelven a McQ, las calles húmedas y serpenteantes de Londres, la fría nieve y la oscuridad de las aguardentosas mansiones de piedra gris. El delirio.


Y llega la India y el poder de las sedas y aquellas damas se trasladan a las colonias y, allí todo es oro y sedas y lujos. Y el negro es blanco y el gris es oro y la lana es seda y la piel es terciopelo.


Y allí aquellas damas del demi monde son de la realeza y es que allí los burgueses son los reyes y, ellas visten como princesas.


Y McQ sabe lo que es la riqueza, la riqueza es oro, son joyas y es exceso. Como dirían algunos “el exceso es mejor que el buen gusto” y, él lo sabe y; ellas también.


Azul real para las damas de McQ que se han convertido de cuervos góticos de Poe a relucientes damas opulentas y decadentes.


Llegan soñadoras y furtivas, exquisitas como damas reinantes y son eso, puro exceso, puro artificio pero ¡Qué belleza!


Y cierra el desfile una emperatriz, que llega a la India salida de la regia Inglaterra y avanza distinguida, elevada, altiva, ausente en el desfile y, McQ oye el silencio roto por un aplauso. Y Dios salva a la reina y McQ triunfa.


Las mujeres de McQueen son almas errantes, damas sublimes, damas de la noche y mujeres atrapadas en la realidad. El color es el sueño, el oro es el paraíso y las Josefinas son del II Imperio Francés. Inglaterra, Francia, India, el Imperialismo, la guerra, el capitalismo. El esplendor, la decadencia, los opuestos. Eso es McQueen, genio, delirio, sublime. Son mujeres atrapadas en dos mundos, la oscuridad terrenal y la liberación celestial. La línea entre dos mundos por McQ.

6 comentarios:

Juan Ríos dijo...

McQ atrapa las normas de una Inglaterra victoriana, donde este emperatriz dominaba todo el sudeste asiático envolviendolo de una magia colonial exóticamente exacervada, fatuosa, casi operística.

Donde los tejidos, las formas, los vólumes, los estampados... todo, ese todo que parece estar destino a reflejar una mujer aguerrida y conocedora de la tradición pero dispuesta a tomar por bandera el mundo haciéndolo suyo de la forma más bella posible.

McQ devuelve mi esperanza al pret á porter. No todo van a ser trajes para ir a la oficina o simples disfraces para muñecas siliconadas, esto es moda y McQ es la esencia más real y británica de ella.

Pd. Enfermo con tus comentarios, son inspiradores. De verdad.

Un saludo

Holly Golightly dijo...

Yo Douglas. Gracias. Llevas toda la razón, con McQ entran ganas de ver costura. Un beso

Irene (capuccinobar) dijo...

es un diseñador inigualable.

Holly Golightly dijo...

Capuccino Bar. Cierto. Un beso

Anónimo dijo...

Me ha encantado McQ, es genial y un gran disñeador. Lo que más me ha gustado ha sido tu descripción y que en el desfile te imaginas el mundo.

Besos

Holly Golightly dijo...

Anónimo. McQ es genial, un genio. Y el desfile preciosista. Gracias. Un beso