Karl Lagerfeld se está obsesionando con una nueva generación Chanel, princesas pero con un punto rock. Por un lado le tientan los devaneos americano todo honor de la sangre verde y, por el otro, sigue prestando atención a las princesas destronadas europeas, a las niñas buenas-malas pero it girls al fin y al cabo. Lagerfeld es un traidor, por supuesto, pero sus colecciones atraen a mucho público y, consigue que sus prendas se vendan. Para el invierno que viene, más bien otoño, en este caos de estaciones difusas y producto de la imaginación; Lagerfeld se pervierte: vuelve la gasa, las perlas, el negro, el tweed, las plumas, las cadenas y las Ces a Chanel pero, con reinterpretación incluida. Vuelven los mitones a Chanel, las filles terribles pero vestidas de Chanel y, las parisinas decadentes.
A Lagerfeld siempre le han gustado las niñas buenas en Chanel. Para las mañanas de oficina, el kaiser ha creado chaquetas estampadas en dos prints combinadas con una falda negra de corte irregular y con accesorios con un toque gótico; como estilismo, el cabello recogido con volumen, los ojos captando la atención y pequeños detalles dorados en los complementos.
El Moulin Rouge y el aire decadente de Francia también tuvo cabida en el desfile; un abrigo de tul estampado con grandes topos y fruncido formando capas era el complemento de un diseño sobrio con detalles en tonos Burdeos. El cabello, recogido en un moño alto con volumen está decorado con un tocado en flor algo oscuro y, como accesorios, las mangas, la pechera y el cinturón están labrados con motivos brillantes.
Caperucita viaja a Londres y viste de Chanel parece querer decir Karl lagerfeld con éste diseño. En ésta ocasión, Lagerfeld ha creado un vestido estampado en crema y púrpura y, combinado con un abrigo túnica con capucha y ceñido por un gran lazo en el escote. Como accesorios, unos zapatos masculinos que, el próximo invierno, parecen desterrar a las bailarinas.
Algo oscuras se han tornado las clientas y musas de Karl. Un minivestido negro combinado con largos mitones de cuero flexible y con una capa bordada en oro y con detalles de plumas es la propuesta de un Lagerfeld algo siniestro que toma como protagonista el color negro.
Lagerfeld lo sabe, las herederas despreocupadas son caducas y, el reinado de las oficinistas comienza con fuerza de nuevo tras los ochenta ejecutivos. El tándem blusa blanca y falda negra funciona a la perfección y, más en Chanel dónde sinuosos collares artesanales decoran el cuello pero rudos zapatos masculinos y potentes bolsos toman el lema de poder y fuerza.
Adolescentes rock, desmelenadas en las noches de (frío) desenfreno. Cazadoras de tweed con corte militar y doble botonadura, minifaldas con volumen; mitones de cuero flexible; botines de color púrpura y bolsos barrocos, brocados y dorados para la noche ¿americana?.
De vez en cuando Karl se delata, y vuelve al decadente Chanel que parece abandonar, rechazar y olvidar. Vuelve a las señoras de edad, vuelve al tweed y vuelve al arte. Lagerfeld presentó éste abrigo de tweed ribeteado en asa decorada con el estampado en tonos marrones en un abrigo largo, de corte recto con bolsillos laterales y, como complementos, detalles en el pelo y fuerte y varonil calzado.
El Petite Robe Noire versionado y adaptado a curvas sinuosas. Tirantes anchos, corte ligeramente superior a la rodilla y la pechera labrada, decorada y pulida en todo su esplendor con un collar dorado, de aplicaciones metálicas que, recuerda a aquellos presentados por McQ cuando versiona a Cleopatra o, a Galliano cuando apuesta por Egipto. Como complementos, zapatos con aplicaciones doradas, mitones metálicos y un toque gótico.
Maxiabrigos de piel, pluma y pelo en el negro más denso y oscuro con grande botonadura, muy 80s y, con el cuello cerrado y el bajo rematado de satén frío y festivo. Como accesorios, (qué más) unas sandalias disco (¿Studio 54?) en negro y oro y guantes de dama negros, medias decoradas y el cabello recogido.
Las densas blusas blancas barrocas, góticas y femeninas de Karl aparecieron al final de la colección- En éste modelo, una blusa engolada con capas de volantes y abierta en el pecho está ribeteada en negro como accesorios y, lleva las mangas al estilo acuchillado. Pantalones anchos, negros, masculinos combinado con un collar, gótico, oscuro y tortuoso (como el alma del poeta).
Lagerfeld ha puesto, otra vez, la estética sobre la ética y toma a sus modelos y las pervierte como un traidor. Carga sus ojos de eyeliner, con un toque gótico, oscuro y siniestro; recoge su cabello en un peinado con volumen y decora, con un estilismo muy cuidado; su cabello con recogidos barrocos, con adornos cargados de simbolismo, con tocados cargados de piedras.
En conclusión, yo diría que Karl se torna oscuro tras una temporada liviana. Vuelve al barroquismo, a sus mujeres fuertes y débiles con la mirada perdida y el logo de Chanel como origen; vuelve al cabello y a los adornos que recuerdan a vidrieras medievales; a princesas perdidas; a damas desheredadas. La colección quiere ser moderna, con el negro como hilo conductor; quiere olvidarse de las odas a las camelias, del eterno lenguaje del tweed, de las discusiones por las perlas y se pierde en los amores de Karl, se pierde en las muñecas vestidas con gasa; en las parisinas decadentes del Moulin Rouge y en esa lucha por la oscuridad Lagerfiana y la claridad liviana de Chanel. Un desfile que guarda un combate; un combate clandestino, clásico, y épico entre el fragor femenino y el poder masculino pero, con el logo Chanel.
10 comentarios:
a mí me ha encantado, lo peor ha sido que Irina ha cantado durante el show.
Karl vuelve a coger a sus antiguas musas, Claudia returns y Devon Aoki ha estado en el desfile.
Chanel necesita un diseñador nuevo ya. KL hace mucho que perdió el norte. Ya no se salva ni la alta costura. Qué pena para la casa más mítica que existe.
Anónimo. A mi la colección no me ha gustado pero es que Lagerfeld, aunque sea un genio, no me parece genial. Tiene delirios de grandeza animados por grandes y altas esferas pero no por talento.
Lo de Irina cantando, a pesar de que muchas veces ella misma haya dicho que no tiene voz pero que siempre había querido ser cantante me mata. Es como una caricatura, Lagerfeld rígido y estricto; Claudia espectacular de musa oficial y luego Irina, despelujada, con sombrero, achaparrada y con Pete... Chanel, todo un show. Un beso
Alterego. Lagerfeld ha perdido el norte porque ya Chanel no es Chanel, es Lagerfeld... Un beso
El total-look es muy Lacroix Haute Couture de la última temporada (que por cierto adoré). Pero ahora en la versión tweed de Lagefeld. Has dicho una frase que concentra todo este fenómeno: "Lagerfeld ha perdido el norte porque ya Chanel no es Chanel, es Lagerfeld".
Besos
tengo sentimientos encontrados hacia ti Holly, porque despotricas contra lagerfeld, pero en casi todas tus redacciones lo sacas al tema, le haces espacios dedicados directa o indirectamente,sucumbes ante la osadia que tiene el señor de hacer lo que le viene en gana,que seria de tu blog sin chanel, sin lagerfeld, sin esas controvercias de la nueva ola de modelos famelicas como irina, o esa rebelde con mucha causa que es freja, son las mujeres de lagerfeld y eso a mi me gusta, y si tanto te desagradan ya no hables de ellas, el ANONIMO 1o me parece estupido lo que dice, porq es la primera vez que irina canta y ya se le ataca, la coleccion me parece siniestra, romantica, sobria, lagerfeld sabe que eso es lo que se vende ahora el eterno esperitu rebelde, el teen rock, esta coleccion y la de otoño invierno 2006 me han encantado. Dices que Amas a claudia, pero freja te atormenta.
saludos!!!
Eduardian Guy. Llevas mucha razón, las petites filles de Chanel parecen las modositas de Lacroix... Un beso
Anónimo. No me extraña que tengas sentimientos encontrados porque hasta yo conmigo los tengo :b
La verdad es que la marca de Chanel siempre me ha gustado, el espíritu de Coco Chanel siempre fue genial, iracunhdo, mágico, imperfecto, con rumores, habladurías y con un lado oscuro que es muy criticable. Chanel es fruto de mis pasiones y mm is odios.
Lagerfeld me atormenta, lo cierto es que me parece genial que no genio y por eso hablo de él. Un beso
A mi tamb me parece genial de verdad, me encanta!Me ha gustado toda la colección. Irina cntando???Madre mia...
BESOSS
Lara. Lo de Irina no tiene nombre, o se es modelo o se es cantante y, si se es ambas bien no así.
Un beso querida.
No se que le pasa a Karla esta temporada que está perdiendo un poco el norte,el sur ,el este y el oeste
me parece genial tu post. muy critico y atrayente.
en mi humilde opinion la coleccion de Karl me atrae y bastante, quizas sea por mi edad o por mis particulares "tendencias" en moda, pero creo que Karl ha presentado una coleccion interesante y creativa.
Aunque un poco repetitiva. Y eso de que se "inspire" en musas como Lohan ya me tiene un poco cansada.
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